Despertar el interés de los consumidores y establecer un vínculo con ellos se convirtió en el principal desafío de las compañías. En este contexto, las tecnologías inmersivas plantean formatos disruptivos que, al ser accesibles y tangibles, conectan directamente con los usuarios.
Hoy la sociedad atraviesa un momento singular, que obliga a sectores como la comunicación y al marketing a replantear sus estrategias y su forma de llegada al público. Vivimos en un momento donde las personas tienen acceso a una cantidad de información nunca antes vista y reciben estímulos constantes a través de las redes sociales y la web.
Sin embargo, frente a este contexto y en la mayoría de los casos, la experiencia de compra en E-commerce sigue limitándose a observar fotos o ver un vídeo que persigue el fin de convencer a las personas de comprar un determinado producto.
Cabe preguntarse entonces si existen formas más innovadoras para llevar adelante procesos de venta efectivos y que sean cautivadores para los usuarios. La respuesta es sí, ya que estamos siendo testigos de una nueva forma de comprar y vender a través del uso de la Realidad Aumentada.
Esta nueva fase inmersiva e interactiva del comercio electrónico ya llegó y se está abriendo paso entre las principales marcas de consumo a nivel internacional. En gran medida, este fenómeno se debe a que la Realidad Aumentada ha demostrado su capacidad de generar la atención, el interés y la recordación de los usuarios, que luego se refleja en las ventas.
¿Por qué incorporar Realidad Aumentada en tu E-commerce es una buena decisión?
En primer lugar, existen numerosos estudios que dan cuenta del impacto positivo que tiene el uso de tecnologías inmersivas en procesos de ventas. Por ejemplo, según un estudio de Shopify, la tasa de conversión de los productos con Realidad Aumentada es 94% superior a la de los productos que no la tienen.
Un aspecto fundamental que explica esta increíble cifra es que la Realidad Aumentada brinda la posibilidad de probar antes de comprar, utilizando nada más que el celular o la tablet.
Por otro lado, la Realidad Aumentada aplicada al comercio electrónico logra que la interacción con los usuarios sea menos transaccional y más cercana, ya que los sumerge en una experiencia interactiva que invita a la navegación y a la exploración de contenidos especialmente diseñados.
En este aspecto, según el Accenture Interactive 2020 Immersive Experiences Survey, el 47% de los consumidores afirma que las tecnologías inmersivas los hacen sentir más conectados con los productos y/o marcas.
Pero eso no es todo: un estudió de Daymon mostró que el 40% de los consumidores están dispuestos a pagar más por un producto si pueden explorarlo a través de Realidad Aumentada.
Un caso de éxito que evidencia el rol clave de la Realidad Aumentada en el proceso de ventas fue el que llevamos adelante desde CamOn junto con la tienda Liverpool de México, donde los resultados superaron en un 40% el indicador de alcance para formatos tradicionales.
La clave fue la innovación: CamOn creó probadores virtuales de 10 electrodomésticos y la tienda los usó para crear publicidad digital en la web y en redes sociales. De esta forma, los usuarios que hacían click en los anuncios podían ver una versión hiper-realista en 3D de su ítem de interés y probarlo en sus hogares.
Por último cabe mencionar que la Realidad Aumentada aplicada al E-commerce tiene múltiples formas de uso y aprovechamiento, y no se limita a un sector específico del mercado, sino que cada vez agranda más su alcance, ofreciendo una mayor cantidad de soluciones y oportunidades para todo tipo de productos y servicios.